El conflicto entre China y el Tibet se remonta a sucesos ocurridos en el año de 1949, antes del régimen chino.

Por una parte China asegura que el Tibet es una parte más de su territorio debido a uniones de dinastías, en tanto que los tibetanos manifiestan que su territorio ha sido en múltiples ocasiones sometido a los designios chinos, siendo el más reciente el sucedido en 1950.

La historia considera que los pueblos tibetanos comenzaron a ser una entidad política por el siglo VII, que es cuando surge el primer reino. En este escenario político surge Songtsen Campo (604-650), héroe tibetano, que unifico a los pueblos del Reino del Tibet.

Es en estos tiempos cuando iniciaron los vínculos con China, como parte de sus alianzas Songtsen se caso con Wencheng una princesa china de la Dinastía Tang, aunque también tuvo una esposa proveneinte de Nepal.

Resulta ser esta unión el argumento por el cual los chinos consideran al Tibet parte de sus territorios, opuesto a los tibetanos independentistas que manifiestan que el aislamiento geográfico lo ha hecho de forma virtual independiente.

Reyes posteriores a Songtsen expandieron el territorio del Tibet que pusieron incluso en peligro a la civilización china llegando incluso a controlar Changan (actual Xian) la capital del "Reino del Centro".

En el 1240 los mongoles, quienes controlaron China desde 1215, invadieron el Tibet ejerciendo influencia sobre los líderes políticos y religiosos.

Hacia el 1372 China bajo la Dinastía Ming otorgo al Tibet el estatus de virreinato obligando a pagar un tributo a la corte china, que significaba que China reconocía al Tibet como parte de su dominio, algo negado por los tibetanos independentistas.

Fue en 1720, la ultima Dinastía Qing quienes aprovecharon un conflicto entre lideres tibetanos, para invadir su territorio y designar al Dalai Lama como líder de la región.

Entre los siglos XIX y XX, el Tibet como otras regiones asiáticas intentaron ser colonizadas por países occidentales, destacando Gran Bretaña, quienes exploraron la región y encabezados por el Coronel Francis Younghusband en 1904 iniciaron la invasión. Durante su avance murieron entre 1,300 y 5,000 tibetanos de acuerdo a distintas fuentes.

Una vez que llegaron a lhasa, Inglaterra impuso al Tibet y a China, la apertura comercial con este país, destacaba en este acuerdo que consideraba al Tibet una región independiente pese a la molestia de Beijing.

En 1913 con la caída de la Dinastía Qing y el caos de los primeros años de la República China, el Tibet reclamo su independencia. Esa anarquía permitió que el Tibet se fortaleciera como una entidad independiente hasta 1950, un año después de la instauración del régimen cubano cuando los chinos invadieron la región.

Los tibetanos iniciaron una rebelión que fracaso tan solo unos días después de iniciar el 10 de marzo de 1959 que dio lugar a un exilio del Dalai lama y al exilio del Gobierno Tibetano. Este gobierno afirma que la invasión y control chino en casi medio siglo, ha provocado la muerte de un millón de tibetanos y la destrucción de monasterios y templos, acentuándose durante la Revolución Cultural Proletaria (1966-1976).


Fuentes Wikipedia Tibet will be free Tibet free