Una pieza del Solenoide Compacto de Muones (CMS). Créditos: CERN.

El Gran Colisionador de Hadrones estableció un nuevo récord para la creación de haces de partículas energéticas en esta. El acelerador de partículas, que superó al Tevatron del Fermilab en diciembre como el acelerador de partículas más potente, rompió su propio récord, al lograr la carga de partículas de 3,48 TeV.

Tal carga de energía es tres veces mayor a la que hasta el momento el ser humano había podido crear, pero tan solo es la mitad de la capacidad máxima que el LHC puede lograr.

Después de una serie de contratiempos y reparaciones en el último año y medio, el Director de aceleradores del CERN y Tecnología Steve Myers considera que se ha obtenido un importante logro. "La obtención de niveles de energía a 3,5 TeV es testimonio de la solidez del diseño general del LHC, y las mejoras que hemos hecho desde la falla en septiembre de 2008", dijo Myers en un comunicado de prensa. "Es un gran crédito a la paciencia y la dedicación del equipo del LHC."

El LHC permitira a los científicos a comprender mejor la naturaleza de la masa, la materia oscura y los orígenes del universo. Si bien existe la esperanza de confirmar el conjunto actual de modelos teóricos que todos hemos llegado a conocer -teoría de cuerdas, la energía oscura, el bosón de Higgs, etc.- está también la renuente idea de que surja algo totalmente inesperado del experimento del CERN.


La próxima escala para el experimento del LHC es lograr el choque de partículas para crear una explosión pequeña y espectacular que podría confirmar o desafiar décadas de predicciones teóricas. A través de las muestras que se recolecten, los físicos podran encontrar partículas subatómicas que sólo existe en determinadas situaciones hipotéticas. Por ejemplo, la detección de ciertos tipos de partículas supersimétricas, alias partículas-s, podría ser visto como lo que el físico Michio Kaku llama "las señales de la dimensión 11".

Mientras que la energía del haz del LHC es ciertamente impresionante, la potencia es sólo un componente en la calidad de los datos que un acelerador de partículas puede producir. La comprensión de la increíble cantidad casi inconmensurable de información que resulta de las colisiones requiere un iterativo ajuste y exhaustivo aprendizaje mediante la práctica.

Así, mientras que el Tevatron, el último gran acelerador de partículas estadounidense, avanza a menos de un 1 Tev parece haber logrado antes del LHC la detección del Bosón de Higgs. Y ese podría ser el acto final antes de la instalación de alta la antorcha de la energía física pasa completamente de Batavia, Illinois, a Ginebra.

Referencia


Alexis Madrigal, "Large Hadron Collider Triples Its Own Record", Wired.